Son 600 los monumentos que hay en la ciudad. Hoy muchos están sin cabeza, mutilados, rayados o rodeados de aguas negras y escenarios desastrosos. Héroes de la patria, santos, ángeles y esculturas; de mármol, piedra, granito y metal sufren además las consecuencias del clima capitalino que pasa de sol a lluvias torrenciales en un abrir y cerrar de ojos.
Hace exactamente un año la Administración Distrital adelantó un proyecto para la recuperación de todos los monumentos de Bogotá. El 20 de diciembre de 2012 se inició la restauración. El proceso inicial costó 8 millones de pesos, sin embargo a la primera manifestación ocurrida en enero la inversión se había perdido.
Gonzalo Jimenez de Quesada, en la Plazoleta del Rosario, fue revitalizado hace un par de meses. En esta figura y sus alrededores se invirtieron 16 millones de pesos. Hoy luce igual que antes.
El parque de los periodistas con el templete del Libertador, diseñado en 1883 por Pietro Cantini, hoy es el principal lienzo para hacer grafitis. Uno sobre otro van cubriendo por completo el monumento.
Aparte de ser baño público para palomas e indigentes, el deterioro por el tiempo, el olvido de los capitalinos y los estragos de los actos vandálicos, suprimen el sentido histórico y cultural de los monumentos.
Él es Juan Carlos Rodriguez, un habitante de la calle quien desde hace 9 años cuenta las historias emblemáticas de la Plaza de Bolivar. Este señor más que nadie ha sido testigo del vandalismo que noche tras noche se toma la estatua del Libertador.
De algunas sólo queda la base. Por ello el Instituto Distrital de Patrimonio Cultural (IDPC) ha hecho el esfuerzo y la inversión necesaria para volver a construir aquellas que ya no tenían salvación.
Muchos de los transeuntes distraídos por la rapidez del mundo contemporáneo, desconocen por completo el significado de las esculturas que adornan la ciudad y ni siquiera se detienen a observarlos.
Tres meses demoraría el proceso para comenzar la limpieza de un monumento, puesto que se hace por concurso público. En espera se encuentran las más afectadas tras las manifestaciones del Paro Agrario.
Hay cosas que la limpieza por parte del IDPC no puede evitar y es el hecho de que muchas estatuas por encontrarse al alcance de los peatones sean descabezadas, tumbadas e incluso robadas.
'La Mariposa' del maestro Edgar Negret, fue recuperada una vez de los vendedores ambulantes. Volver a hacerle el proceso de restauración implica la limpieza de grafitis y la repintada lo cual costaría cerca de 180 millones de pesos.
La estatua de la Plaza de Bolivar es una de las más afectadas por las manifestaciones del centro. Para limpiarla y recuperarla se invirtieron la última vez 8 millones de pesos. Sin embargo cada semana empleados del IDPC regresan para tratar de limpiarla.
La limpieza y conservación de los monumentos dura en algunas casos menos de 20 días por el pso de protestas y la ocurrencia de distintos disturbios.
1.300 millones de pesos son los que se invertirán en la totalidad de la recuperación llevada a capo por el IDPC. Los recursos financieros provienen del IVA a la telefonía celular.
Hoy el plan de revitalización continúa acompañado del Plan denominado Centro Ampliado. La primera fase abarca el centro tradicional puesto que las urgencias de descabezados y rayados los más deteriorados.
Hoy el plan de revitalización continúa acompañado del Plan denominado Centro Ampliado. La primera fase abarca el centro tradicional puesto que las urgencias de descabezados y rayados los más deteriorados.